Hoy vamos a hablar de cuando era niño y tenía alrededor de ocho años de edad y antes de que mi familia se convirtiera en una familia de testigos de Jehová.
Como advertencia esta parte de mi vida es una colección de recuerdos algo desconectados y un poco difusos en algunas partes.
Es algo difícil recordar tanto atrás y en este momento de mi vida no tengo a mi familia para ayudarme a reconstruir la historia.
Espero que esto se vuelva mas conversacional a medida que lleguemos a mis recuerdos más sólidos…pero esta primera parte es importante pues muestra cómo era la vida para mí al principio. No te puedes dar cuenta de los cambios sin saber primero cómo empezó todo.
Tal vez algunos de ustedes recuerden algo que les pasó a ustedes también cuando eran niños.
Y bueno, cuando era niño todo empezó muy normal, era un niño como cualquier otro. Me gustaba el Hombre Araña, el increíble Hulk.
Recuerdo ver Los Duques de Hazzard y jugar con mis soldados de juguete.
Y aunque me gustaban los juguetes todo lo que realmente necesitaba para ser feliz era un balón o una pelota.
Cuando tenía uno lo lanzaba, lo botaba, me lo lanzaba a mi mismo… podía jugar así horas y horas.
No necesitaba mucho. Los deportes eran importantes para mí.
Tenía algunos amigos con quienes iba a jugar a su casa, amigos de la escuela.
Tenia una familia muy unida.
Vivíamos en el mismo vecindario que mis abuelos, más o menos a dos o tres cuadras de distancia.
Podíamos caminar hasta su casa a cualquier hora.
Recuerdo los días festivos y las fiestas. Recuerdo ir a pedir dulces el día de brujas en mi vecindario.
No recuerdo de qué me disfrazaba pero sí era muy divertido.
Recuerdo haber llenado cubetas y cubetas de dulces ¡¿a quién no le gusta eso?!
El Día de Acción de Gracias era otro día que recuerdo era muy divertido también.
Íbamos a la casa de mis tíos por parte de mi papá y toda la familia estaba ahí. Mi abuela vivía en Georgia y venía a visitarnos hasta Kentucky, le decíamos abuelita con mucho cariño.
Comíamos y veíamos fútbol, jugabamos afuera con mis primos. Eran buenos tiempos.
En Navidad íbamos a la casa de mis abuelos por parte de mi mamá.
Recuerdo que nos daban catálogos de juguetes para verlos y elegirlos.
No sé si creía en Santa Claus, supongo que sí como cualquier otro niño. Pero bueno, lo que fuera que quisiéramos que Santa nos trajera (supongo que santa usaba ese mismo catálogo) lo teníamos que encerrar en un círculo y así era como sabíamos lo que nos traería.
Recuerdo que cuando íbamos a casa de mis abuelos siempre había mucha buena comida, galletas y dulces… siempre he tenido un gusto particular por los dulces, quienes me conocen lo saben.
Mis tíos de ese lado de la familia llegaban con mis primos desde Michigan. Era divertido estar todos juntos.
Mas o menos recuerdo que había otros familiares ahí también, tal vez otros primos cercanos o algo así. No lo recuerdo muy bien, supongo que nunca tuve mucha conexión con ellos. Hemos dejado un poco atrás a nuestras familias.
Pero bueno, también recuerdo los dibujos animados de los sábados por la mañana…me encantaban! Recuerdo levantarme a verlos sin preocuparme de nada en el mundo. Recuerdo que llegaba a casa de la escuela y había dibujos animados en la televisión. Recuerdo que había esos especiales de después de la escuela y también me gustaba verlos.
Detrás de la casa en la que vivíamos en ese entonces había un río. Iba a jugar ahí todo el tiempo, obviamente, qué niño no lo haría?
Siempre me pregunté qué había en esos agujeros alrededor del rio y más o menos recuerdo que les metía palos, quién sabe si molestaba a algo a alguien cuando hacía eso.
Recuerdo que tenía una caja de arena !me encantaba la caja de arena! ¿Y a quién no?
Recuerdo que una vez estaba jugando en el patio de atrás, mi pelota rodó junto al árbol y el árbol tenía una serpiente enrollada en el tronco… me agaché para levantar el balón, vi la serpiente y pensé que moriría! JAJA. Era una serpiente. ¿Quién no pensaría eso?
Teníamos un perro, Barkley, era un coli. Por alguna razón lo regalamos.
Lo que recuerdo es que le gustaba comerse el pasto del patio de atrás y por eso se convirtió en un lodazal.
Mi vida era muy buena en realidad.
Lo único que realmente hizo un cambio fue mi papá y sus problemas laborales.
Mi papá nunca fue el tipo de persona que pudiera salir y conseguir un trabajo por sí mismo.
Siempre batalló con eso. Si alguien le daba un trabajo él lo tomaba y lo hacía. Le gustaba trabajar.
Era trabajador y honesto, pero no era exactamente lo que uno definiría como alguien con ambición.
Trabajó en Brown and Williamson, la famosa empresa tabacalera en Louisville Kentucky y al parecer ese era un muy buen trabajo. Mi abuela, su mamá, trabajaba allí así que creo que tuvo alguna influencia en cómo consiguió ese trabajo considerando sus problemas.
Luego la compañía se mudó a Georgia y mi papá decidió no mudarse con ella.
Creo que se casó con mi mamá por esas fechas y se quedó aquí en Kentucky.
Era un muy buen trabajo pero se acabó cuando la empresa se fue.
Sé que después de eso estuvo de trabajo en trabajo.
Trabajó en UPS durante un tiempo… trabajó en General Electric, que era un muy buen trabajo, pero lo despidieron.
Y por todos éstos despidos llegó el momento en el que tuvimos que hacer un gran cambio. Las finanzas familiares ya no nos permitieron seguir viviendo donde vivíamos.
Así que nos mudamos a mediados del año escolar.
Yo tenía unos siete años, por lo que tal vez ya estaba en el segundo grado.
Recuerdo que cuando me cambié a la nueva escuela un profesor me acompañó por un pasillo que me pareció como una cueva hacia mi nuevo salón de clases.
Tuve que ponerme frente a la clase y presentarme a todos, yo solo quería desaparecer o morir ahí mismo.
No soy una persona a la que le guste estar frente a mucha gente. No soy extrovertido en lo más mínimo. Incluso estar haciendo éste podcast es algo fuera de lo ordinario para mí. pero me estoy esforzando en hacer algo nuevo a pesar de que hay una parte de mí que solo quiere esconderse.
Pero bueno, este cambio en el segundo grado no fue nada comparado con lo que estaba a punto de suceder.
Por un lado, recuerdo que nuestra nueva casa tenía muchos problemas. Al principio mis papás no lo sabían pero estaba infestada de cucarachas. Teníamos un vecino al lado y su patio estaba lleno de basura. Tenía muchas partes de televisores, electrodomésticos y muchas otras cosas. No sé si eso contribuyó a que se produjeran las infestaciones que afectaron a todo el vecindario o si solo fue el hecho de que todos en el vecindario teníamos casas muy viejas.
Pero sí recuerdo muy bien las cucarachas, recuerdo irme a acostar en la noche viendo cómo las cucarachas subían por la pared esperando no vinieran a mi cama a visitarme.
Recuerdo que mi mamá consiguió una sustancia química muy extraña con la que trató de acabar con ellas. Recuerdo escuchar el término cucarachas alemanas por lo que creo que ese era el tipo de cucarachas que teníamos en la casa.
Pero después de que mi mamá aplicó esa sustancia resultó en que llegamos a tener unas cucarachas mutantes, espantosas y repugnantes que de alguna manera sobrevivieron e hicieron más grande el problema.
Eventualmente, ese problema se acabó, la plaga terminó y pudimos seguimos adelante.
Mis papás me contaron de una historia en la que yo les aseguraba que había algo en mi cama mientras dormía pero ellos pensaron que era una pesadilla o un monstruo que yo me había inventado.
Pero cuando encontraron excremento de ratón en mi cama se dieron cuenta de que en realidad sí había un problema.
Por si fuera poco esa casa también tenía grillos de cueva, también se les llaman grillos camello. Son desagradables, son grillos enormes con patas traseras tan largas que los hacen parecer arañas.
Y aunque no me gustan las arañas al menos no tuvimos ningún problema con ellas.
Ese tipo de cosas dejaron pequeñas cicatrices en mi niñez además de que hubo muchos otros cambios. Pasamos de una casa en un buen vecindario a una casa en malas condiciones en un vecindario no tan bueno y una escuela nueva para mí.
Mientras hacía memoria sobre esto recordé que en el tercer grado casi reprobé. Me di cuenta cuando vi todos mis trabajos al final del año y claramente no fui un niño organizado ni aplicado.
No sé, siempre había obtenido calificaciones decentes antes de eso así que tal vez fue a causa del cambio de casa y todo lo demás que empecé a tener problemas.
Pero también me estoy dando cuenta de que fue por esa época que mi mamá comenzó a estudiar la Biblia.
Por supuesto no puedo regresar y preguntarle, por lo que estoy tratando de construir una línea de tiempo según lo que alcanzo a recordar.
Pero bueno, le decían estudiar la Biblia aunque en realidad era estudiar una de las publicaciones de los testigos de Jehová o algún libro publicado por ellos.
Son la Sociedad de Biblias y Tratados de la Torre del Vigía de Nueva York.
Son, de hecho, una empresa editorial, y alguno de esos libros publicados por esas fechas era el que usaban para estudiar la Biblia con mi mamá.
Por supuesto ellos eligen qué versículos estudiar de modo que se ajusten a su ideología.
En fin, mi mamá empezó a estudiar la biblia con la vecina que vivía justo al lado de nuestra nueva casa. Porque, como si no hubiéramos pasado ya por suficientes cosas malas, nos teníamos que haber mudado al lado de unos Testigos de Jehová.
La vecina y mi mamá se hicieron amigas muy rápido. Hablaban de de cosas de la vida y mi mamá siempre tenía muchas preguntas acerca de la biblia.
Mi tío, el hermano de mi mamá es un ministro bautista, creo que terminó el seminario pero nunca pudo responder a las preguntas de mi mamá o al menos no a su entera satisfacción.
Sin embargo, los Testigos de Jehová tienen una respuesta para todo.
Claro, siempre tener una respuesta no significa que sea una respuesta correcta.
Pero tienen una respuesta para casi cualquier cosa que les puedas preguntar y tienen una manera de hacer que la respuesta encaje en su ideología… o al menos logran hacer que dejes de pensar en lo que sea que te preocupe en el momento.
Alrededor de esas fechas muchas cosas estaban cambiando en mi vida. Yo tenía alrededor de ocho o nueve años. Tenía un hermano menor para entonces. Él es entre cuatro y tres años y medio menor que yo.
Pensándolo bien, no creo que haya sido solo una coincidencia que mis calificaciones sufrieran tanto ese año ya que no sólo habían cambiado muchas cosas agregando que mi mamá estaba estudiando la biblia, sino que también nos llevaba a las reuniones de los testigos de Jehová.
En esas épocas íbamos a las reuniones una hora el martes en la noche, dos horas el jueves en la noche y luego otras dos horas el domingo en la mañana.
Así que hubo una exigencia de tiempo desde el principio y ésta sólo seguiría creciendo con el tiempo.
Hablaré de eso más adelante cuando hable de los años posteriores de mi vida pero ésta exigencia de tiempo es mucha para un niño.
Agregado a esto hubieron aún más cambios. No sé exactamente cuándo pero en algún momento mi mamá ya no quiso celebrar los días festivos ni cumpleaños.
Si conoces a los testigos de Jehová y tal vez es algo muy conocido acerca de ellos es que no los verás celebrando la Navidad, los cumpleaños ni nada por el estilo. No, celebran, nada. Para ellos, los días festivos son paganos y por lo tanto creen que son algo que Dios no aprueba.
Al principio mi papá no estaba interesado.
Mi mamá iba a las reuniones y nos llevaba con ella aunque no recuerdo si íbamos a todas, pero a mi papá le tomó alrededor de un año darse cuenta y empezar a preguntarse acerca de eso en lo que mi mamá se había metido.
Creo que lo primero a lo que mi papá asistió fue a una Asamblea de Distrito donde, de hecho, mi mamá se bautizó.
El bautismo es algo muy importante para ellos.
Y solo para explicarlo un poco para quienes no saben el contexto, cuándo estudias la biblia con un testigo de Jehová estudias uno de sus libros.
Al final de este libro, en esencia debes tener suficiente conocimiento como para convertirte en un testigo de Jehová.
A veces estudiabas un segundo libro, al menos así era antes.
Quieren asegurarse de que has arreglado tu vida de acuerdo a sus valores. No puedes estar viviendo lo que ellos consideran una vida inmoral.
Entonces, si estás viviendo una vida recta, a su parecer, y si tienes el conocimiento de estos libros, puedes entonces pasar por un proceso en el que un grupo de 3 ancianos te harán preguntas de otro libro.
Los ancianos son el grupo de hombres que dirigen cada congregación.
Estos tres ancianos se sentarán contigo para hacerte las preguntas. Un anciano a la vez, un grupo de preguntas a la vez en tres ocaciones diferentes.
Básicamente evalúan cómo estás en tu vida y si creen que estás listo te permitirán bautizarte como testigo de Jehová.
Esos bautismos, también llamados dedicaciones, se llevan a cabo en las asambleas.
Hay tres asambleas cada año
Está el día especial de asamblea que es de un sólo día en primavera, está la asamblea de circuito que es de dos días y pasa en otoño.
Comúnmente durante el verano tienen sus asambleas de distrito y estas duran hasta 3 días… ahora les llaman asambleas regionales.
En aquellas fechas, los distritos eran mucho mas grandes e íbamos a la gran arena Freedom Hall en Louisville Kentucky. No estoy muy seguro pero mas o menos recuerdo que la asistencia esa vez fue de alrededor de doce mil personas.
Entonces, lo primero a lo que mi papá asistió fue un evento grande porque mi mamá se bautizó en una de estas grandes asambleas y éste fue un gran paso de mi mamá para convertirse oficialmente en testigo de Jehová.
Yo creo que mi papá vio esto y pensó:
Creo que esto sí es en serio… tengo que entrar y descubrir de qué se trata.
Y así lo hizo.
No pasó mucho tiempo antes de que un hermano muy amable y carismático de la congregación tomara a mi papá bajo su ala.
Estudiaron juntos y creo que al año siguiente mi papá se bautizó también.
No tomó mucho tiempo… estamos hablando de alrededor de uno o dos años para que mis padres se conviertan en testigos de Jehová oficialmente.
y desde ese momento definitivamente no hubo más días festivos ni celebraciones.
Aún recuerdo mi última Navidad… recuerdo a mi mamá sentándose conmigo y diciéndome que no íbamos a celebrarla nunca más.
No recuerdo exactamente cómo me sentí pero estoy seguro de que no estaba muy contento.
Después me enteré de algo que comúnmente se les dice a los hijos de los testigos de Jehová:
“No necesitamos días festivos para celebrar o dar regalos. La gente sólo da regalos en esos días por compromiso u obligación. No son regalos genuinos ya que en realidad no lo hacen de corazón.
En cambio nosotros podemos darte regalos cualquier día del año y sí de corazón”.
Así me convencieron a mí y a muchos otros niños… como si fuera real que fuéramos a recibir más regalos ya que no teníamos que esperar hasta los días festivos.
Podríamos hacer una apuesta sobre cuántas celebraciones y regalos existen en una familia de testigos de Jehová en comparación con otras familias.
No puedo hablar por todos pero en realidad no tuve muchos amigos testigos de Jehová que recibieran muchos regalos o celebraran mucho.
Como pueden notar, nuestra vida había cambiado mucho.
Así que éste el resumen del comienzo de mi vida: empezó como habría empezado para cualquier otro niño. Pero lo único que sé necesitó fue una mudanza inesperada por parte de mis padres que sufrieron un golpe financiero, y luego, por azar resultó que nos habíamos mudado al lado de unos testigos de Jehová. Y entonces empezaron los cambios.
En el próximo episodio voy a hablar más sobre cómo cambió mi vida desde ese momento en adelante. Aparte de algunas cosas que ya he mencionado hablaré de cómo es para un niño crecer en esta secta. Cómo es la vida escolar y cómo es la vida cotidiana en casa.
Esta no es una religión que se practica sólo cuando vas a la iglesia, este es un estilo de vida y abarca todo lo que haces, la forma en la que piensas, la forma en que te sientes y la forma en que actúas. Lo es todo y domina tu vida por completo.